¿POR QUÉ ESCRIBIMOS?

AL NO PODER ACEPTAR QUE SOMOS LIBRES EN JAULAS, NOS MOVEMOS EN MUNDOS DE PALABRAS QUERIENDO SER LIBRES

TRADÚCEME

COMPAÑEROS DE LUCHA EN PLUMA AFILADA

AVISO TODOS LOS TEXTOS ESTÁN REGISTRADOS

Blog bajo licencia Creative Commons

Licencia de Creative Commons

TODOS LOS TEXTOS ESTÁN REGISTRADOS

POEMAS, CUENTOS Y ESCRITOS REVOLUCIONARIOS DE DANIEL FERNÁNDEZ ABELLA is licensed under a Creative Commons Attribution-NonCommercial-NoDerivs 3.0 Unported License. Para utilizar primero y siempre sin ánimo de lucro ha de consultar al autor. Daniel Fernández Abella todos los derechos reservados.

domingo, 4 de mayo de 2014

SECUNDINO DELGADO. PADRE DEL NACIONALISMO CANARIO



Secundino Delgado fue el padre indiscutible del nacionalismo canario (como en Cuba fue apóstol de su independencia otro canario: José Martí Perez , el "hijo de la Isleña"). Aquel grito de independencia que lanzaba Secundino era apremiante y necesario, y que podía haber hallado eco en la década de los años 30, si otras circunstancias políticas transformadas en guerra civil no hubieran truncando aquel buen deseo ya suficientemente arraigado entre los canarios.

Secundino Delgado luchó toda su vida, a través de los ideales del progresismo y de la independencia nacional que adquirió en Cuba, por su pueblo canario con el objeto de que despertara de aquel largo letargo de injusticias que le obligaban a emigrar o a malvivir en una sociedad injusta y clasista.

Más tarde aquel inicial independentista canario intransigente, desde Florida y Cuba, tornó su ímpetu en los últimos años de su vida para convertirse en un moderado autonomista, tal vez desengañado por las circunstancias que le tocó sufrir, culminando en su detención el 2 de marzo de 1902 por orden del General Weyler, que dispuso su prisión en una cárcel de Madrid. Lo que aquel general, dignificado como Marqués de Tenerife, no pudo llevar a cabo desde La Habana a pesar del intento en 1896, si lo logró desde su puesto de mando en Madrid, como ministro de la Guerra.

SU VIDA

Secundino Delgado, padre de la nación canaria, nació en Añaza (Santa Cruz de Tenerife) el 5 de Octubre de 1867, de una familia modesta (su padre era herrero), de la que nacieron siete hermanos más.  En esa época es cuando comienzan a surgir en Tenerife las primeras organizaciones obreras y asociaciones de trabajadores; sin embargo, a pesar de que poco a poco se irían politizando, la función de estas primeras asociaciones era fundamentalmente asistencial y benéfica, influenciadas por la moral cristiana (llegando a participar en ellas personas ajenas a la clase obrera, como comerciantes católicos y pequeño-burgueses republicanos que colaboran en dichas asociaciones concibiéndolo como una obra de caridad). También ocupará un lugar importante el interés por la formación y educación de los trabajadores, en un contexto donde la inmensa mayoría de la población era analfabeta.

Emigró a América antes de cumplir los veinte años. Secundino va a sumarse a la causa de los independentistas cubanos, estableciendo contacto con sectores independentistas de corte anarquista y a comienzos de 1885 se establece en Estados Unidos (concretamente en Tampa), casándose  en Nueva York con Mary Trifft. Allí trabajará en una fábrica de tabacos, participando además en el Círculo de Trabajadores. En Tampa participará en la redacción del periódico obrero El Esclavo, semanario de ideología anarquista que defendía la independencia de Cuba. En Cuba colabora con los "rebeldes" en la guerra contra el ejército español de ocupación, y donde pronto será un "elemento peligroso", para los servicios de información del ejército colonial. Sus armas serán siempre la palabra y los periódicos.

En 1896 viene a Canarias y nueve meses después viaja a Venezuela esquivando la persecución española. Es el momento de intensificar su trabajo por Canarias, primero teniendo como causa la independencia y, a partir de 1901, una autonomía de amplios poderes para el Archipiélago Canario.
 Será en Venezuela donde Secundino comienza a establecer contactos con la colonia canaria que allí residía, con objeto de organizar un movimiento independentista canario y difundir estas ideas (a través de una publicación que se titulará El Guanche). Esta vez las personas con las que toma contacto proceden de la pequeña burguesía republicana de La Palma, relacionadas también con la masonería; se trata de José Esteban Guerra Zerpa, que había trabajado en el periódico El Time y fundado el Diario de Avisos (más tarde dejaría la dirección de este periódico, que evolucionaría hacia el conservadurismo); y otro personaje que se intuye que pueda ser Francisco Brito Lorenzo. Sin embargo, a pesar de que sus colaboradores no procedieran de este ambiente, Secundino mantendrá en esta etapa su discurso obrerista. Se funda así el periódico El Guanche, con Secundino como director-redactor, el cual tendrá como lema “sólo por las Canarias y para los canarios”, debido a la prohibición que hacía la legislación venezolana sobre la participación extranjera en la política del país (que afectaba también a la difusión de propaganda); ello no impide, sin embargo, que Secundino continúe firmando artículos donde hable del internacionalismo, y del proletariado como “una sola familia”. Pero El Guanche de ningún modo se trata de un periódico obrerista, y de hecho parte de su financiación procede de los comerciantes isleños de Venezuela, por tanto no es igual el discurso de Secundino que el discurso populista e interclasista de algunos de los colaboradores. Por otro lado cabe destacar que los redactores de El Guanche apuestan decididamente por la independencia de Canarias, rechazándose explícitamente las propuestas autonomistas. En el discurso de El Guanche también son habituales los ataques al caciquismo.

Gracias a la creación de asociaciones obreras promovidas por el periodista y tipógrafo José Cabrera Díaz comienza así una incipiente conciencia de clase y la idea de unir a todos los trabajadores varones (si bien comienzan a aparecer tímidamente algunas reivindicaciones tendentes a la igualdad entre sexos, cercanas al feminismo). Se forma así la Asociación Obrera de Canarias, y su órgano de expresión, el periódico El Obrero. José Cabrera Díaz será el presidente de dicha asociación, en la que también participará Secundino Delgado.

Si bien en la Asociación Obrera de Canarias había presencia de anarquistas (como Secundino Delgado) y socialistas, el posicionamiento de la asociación, o al menos de parte de sus dirigentes, tendían hacia el reformismo. Esto puede observarse en los artículos publicados en El Obrero, si bien ello no quiere decir que de vez en cuando se publicaran artículos y discursos con planteamientos más radicales. De todas maneras la conciencia de clase no estaba todavía del todo formada en Canarias, y en la Asociación Obrera podemos llegar a encontrar incluso a monárquicos (si bien posteriormente romperán con ella). Si bien Secundino Delgado partía de una tradición cercana al anarquismo, y ya había defendido la lucha de clases con anterioridad, al ver que su discurso no logra calar lo suficiente en los trabajadores Canarios decide adaptarse en parte al discurso vigente en la Asociación Obrera de Canarias. Por otro lado hay que seguir teniendo en cuenta la reacción españolista que tiene lugar tras el 98, lo que imposibilita que puedan defenderse planteamientos independentistas. A esto hay que sumar la dependencia económica de Canarias con respecto a Inglaterra, que ya es señalada por el propio Secundino.

Desde la Asociación Obrera de Canarias, Secundino y otras personas promoverán la creación de un partido obrero que se presentara a las elecciones. Surge así el que está considerado por muchos como el primer partido de tipo obrero de Canarias el 22 de Octubre de 1901: el Partido Popular Autonomista (PPA). De nuevo nos encontramos con que el discurso no es homogéneo, y se entremezclan los planteamientos interclasistas y moralistas, con otros donde se plantea la lucha de clases. Donde sí parece haber unidad de criterios es en lo que respecta a la cuestión del anticaciquismo. El PPA pretendía presentarse también como una alternativa al caciquismo.

El PPA se declaraba como autonomista, llegando a negar en varias ocasiones que fuera una organización que defendía la independencia de Canarias. Autores como Jesús de Felipe Redondo llegan a negar el carácter nacionalista del PPA, si bien admite que en él habían algunos nacionalistas como Secundino Delgado. De todas formas, el concepto que presenta este autor aquí de nacionalismo es bastante restrictivo, identificando este concepto con el nacionalismo que surge en el siglo XIX y muy relacionado con el romanticismo.
El PPA se presentó a las elecciones municipales de 1901, mas sin lograr buenos resultados, obteniendo un concejal en el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife. La explicación de este fracaso electoral hay que buscarlas, por un lado, en la propia estructura política de la capital del Archipiélago Canario en esos momentos y, sobre todo, por la propia situación de la Asociación Obrera de Canarias conducida por el interés particular de Secundino Delgado, al terreno de la lucha electoralista cuando desde sus inicios había quedado meridianamente claro que la Asociación tenía un carácter apartidista, en parte producto del empuje de sus componentes más conservadores que temían que existiera un partido que se nutriera del voto obreros y, en parte también, por la impronta del anarquismo entre las clases trabajadoras de la ciudad. No se hizo esperar el debate interno en la Asociación Obrera de Canarias que rápidamente se desvinculará totalmente del Partido Popular Autonomista. Esto explica que Secundino Delgado, privado del órgano de expresión de la Asociación, El Obrero, fundara un periódico con la cabecera ¡Vacaguaré!, el cual tendrá una vida muy efímera.

Los redactores de este nuevo periódico eran Secundino Delgado y Manuel Déniz, con algunas colaboraciones de José Cabrera Díaz. Este periódico defenderá más o menos los mismos postulados que el PPA.

Como consecuencia de una vida de luchas, es perseguido y encarcelado en Madrid por Weyler, desde marzo de 1902 hasta enero de 1903. Fueron diez meses de sufrimiento extraordinario.
Escribió en numerosos periódicos dedicados a Cuba, a los obreros y a Canarias. Fue fundador de los periódicos: 'El Esclavo', en Tampa hacia 1892; 'El Guanche' en Caracas el 18 de Noviembre de 1897; y 'Vacaguare', en Tenerife el 30 de Enero de 1902. Su obra literaria principal es '¡Vacaguare!' (Vía Crucis) que escribió en Arafo entre el 25 de Marzo y el 21 de Abril de 1.904. Lamentables fueron los últimos años de su vida. Aquella orden se cumplió y Secundino fue detenido por la Guardia Civil, cuando se hallaba en su casa de descanso de Arafo. Conducido a pie hasta la prisión de Santa Cruz de Tenerife, para seguidamente ser trasladado a la Modelo de Madrid.

Se llevaron a cabo gestiones para su liberación especialmente por el consulado de los Estados Unidos, que representaba los intereses de Cuba en España dada su nacionalidad cubana. No obstante fue internado en la Cárcel Modelo de la capital de España, donde permaneció casi un año sin recibir el auto de procesamiento, motivo de la detención, ni ser sometido a juicio. Con la intermediación de otro gran canario, Nicolás Estévanez, se logró su libertad.

Durante su estancia en prisión adquirió o agravó la enfermedad pulmonar que padecía y que causó más tarde su muerte, 4 de mayo de 1912, en la casa donde habitaba en la Calle Progreso de Santa Cruz de Tenerife y posiblemente, por contagio, la de sus hijos Darwin y Lila.
El asunto había trascendido a la prensa madrileña y a toda la de España y al propio Congreso, donde ningún diputado supo dar razones de aquella injusticia.

Estamos pues ante la presencia de un insólito personaje que jugándose su bienestar y prosperidad, por sus ideales prefirió denunciar el mal que aquejaba a las islas y a los isleños, muy a sabiendas de lo que estaba arriesgando en semejante empresa. Conociendo el peligro de un enfrentamiento a la dura administración española, repetía frecuentemente "Qué importan los sacrificios si algún día llega a alumbrar nuestra Patria el Sol de la libertad"

1 comentario:

  1. Salud compañero. Ahul. Hay un error grave en tu escrito sobre Secundino. Es el siguiente " En 1895 vuelve a Canarias y funda junto con otros el partido independentista Congreso Nacional de Canarias (CNC)" Prtimero. Secundino regresó a Canarias desde Cuba el 10 de mayo de 1896 con documentación falsa A los 9 meses un telegrama de Weyler interesaba su prisión por que se exilio a Venezuela embarcando escondido por los trabajadores del puerto de Santa Cruz. Segundo: el CNC fue creado por Antonio Cubillo al regresar de Argel a Tenerife en 1985

    ResponderEliminar